Al lado del Rio Negro, en el medio de la selva Amazónica, se encuentra el pabellón de “Base Avançada” que hace parte del Parque Nacional del Anavilhanas. Un 60% de su territorio escompuesto por agua, con más de 400 islas. El pabellón fue pensado como una extensión del complejo hotelero “Anavilhanas Jungle Lodge” cerca de 50 kilómetros de distancia. La función del ambiente es acomodar a los turistas como un punto de encuentro entre los recorridos en el área. El restaurante, vestidor y la piscina ofrecen un espacio para relajarse entre la selva y el río, mientras toda la naturaleza se mantiene preservada. Desde el primer boceto, el proyecto desea involucrarse y adaptarse al paisaje, respetando la distancia del río y sus movimientos de alteración de la marea. La implantación en el territorio siguió un sendero ya existente en el área, determinando el punto inicial para posibles caminos por tierra o agua. Se incorporaron materiales y técnicas locales en el desarrollo del proyecto, además hubo también una preocupación con la logística para acceder al sitio. El grid de 4,0m x 4,5m fue elegido para que la estructura de madera cupiera en las canoas, la única manera de llegar al local. Toda la construcción fue realizada por artesanos locales, por eso toda la lógica siguió una idea de montaje sencillo. La forma del pabellón se mezcla con la naturaleza cercana, desapareciendo entre los árboles y arbustos, como consecuencia de la premisa inicial: tener un proyecto con bajo impacto ambiental en el área.