BEIRUT: HACIA UNACIUDAD ACTIVA Dos años después, pocas cosas han cambiado en Beirut. Una ciudad en donde se construyen carreteras, pero no existe un sistema de transporte público. Una ciudad donde los estacionamientos duplican la cantidad de espacio público y el verde ha perecido consolidando una jungla de concreto. Una jungla de concreto que ha crecido de manera descontrolada y que, sin embargo, se encuentra cercada por un límite que desconecta a la ciudad de su borde costero. En 2020, Beirut es el escenario de una de las más grandes explosiones no nucleares dejando 218 personas fallecidas, 7000 personas heridas, 300 000 personas desplazadas, un puerto destruido y la ausencia de operación y producción.Beirut busca su reactivación. La propuesta parte por adoptar el concepto de Ciudad Activa. Una ciudad dentro de una ciudad. Un distrito que concentre todas las funciones de la misma y no solo la industrial como sucedía previo a la explosión, pues el puerto de máquinas ha quedado obsoleto y debe ser sustituido por un puerto para las personas. La propuesta busca devolver el perfil costero al habitante reconectando a la ciudad con el mar. El objetivo principal de la propuesta es el generar una extensión urbana accesible, atractiva, habitable, autosuficiente y memorable. Un territorio consciente del pasado, pero con una mira hacia el futuro.El primer paso consta de la extracción del puerto actual y la relocalización de sus operaciones industriales hacia el Este. Hacia un territorio carente de propósito en la actualidad y cuyo contexto industrial consolidado tiene el potencial de acoger dichas operaciones. A partir de esta estrategia, el programa es visto como una condición de nuevas oportunidades por lo que la organización del nuevo territorio vacante se realiza a través de una serie de bandas programáticas paralelas que responden a la morfología del puerto pasado generando una diversidad de funciones. La sinergia de la diversidad se expresa físicamente a través de la franja verde propuesta generando cohesión sobre la singularidad y rematando en el nuevo parque de la ciudad.El primer distrito de usos mixtos se origina a partir del turismo y el deporte cuyo carácter es consolidado a través de la nueva terminal de pasajeros de Beirut como entrada a la ciudad y el nuevo Estadio Olímpico de Beirut como remate de la ciudad. El distrito se forma desde la ciudad hacia el mar entendiendo y adaptándose a su contexto perteneciente a una de las zonas de mayor legibilidad de la ciudad, el centro histórico. El emplazamiento del proyecto es un recorrido por la memoria colectiva del lugar. En búsqueda de recuperar y transformar todo lo perdido, el distrito manifiesta que la ciudad crecerá sobre la misma tomando así las riendas de su propio desarrollo. El distrito universitario, a través del nuevo campus de la Escuela Marina de Ciencia y Tecnología de Beirut, se consolida como un punto importante para el desarrollo investigativo, tecnológico de las ciencias marítimas en Beirut y el Oriente Medio.