En el año 2020, una pandemia mundial por la Covid-19 obligó a gran parte de la humanidad a recluirse dentro de sus hogares, dejando de lado la cotidianeidad que se mantenía en las ciudades, afectando en gran cantidad a la economía mundial sobre todo en muchos países que ésta ya se encontraba en decadencia. Por ende, el proyecto se inclina a refugiar temporalmente a las personas que lleguen desde el extranjero y tengan un lugar donde acudir. En el sitio del proyecto, los invitados deberán obedecer protocolos específicos, establecidos con el fin de salvaguardar la bioseguridad de laboradores y demás personas que acudan al campamento. Dentro del proyecto se manejan tipologías variadas que, al ser de organización modular puede expandirse sin inconvenientes: módulos de habitar individuales para parejas e individuales y módulos familiares con capacidad para 4 personas. El cantón elegido para la implantación del proyecto fue Tosagua cuya ubicación geográfica fue clave como criterio de elección, pues se halla, relativamente, en el centro de la provincia y es atravesado por varias vías de primer orden que lo conectan con otras ciudades de Manabí a poca distancia, con menos de una hora de recorrido para llegar a la capital Portoviejo. Sin embargo, la idea de una pandemia no se contempla como permanente, todo lo contrario, es un modo de vida que otorgará a la población mundial un punto de vista diferente. Es así como el proyecto de campamento se planificó de manera tal que pueda ser modificado en su tipología con la finalidad de cumplir otra función en caso de finalizar la pandemia mundial. Inicialmente, la comprensión de las necesidades del cantón Tosagua permitieron denotar los altos niveles de analfabetismo digital que aquejan a los habitantes, a pesar de que un gran porcentaje de ellos laboran en áreas donde es necesario tal conocimiento. Por ende se plantea la planificación de un Infocentro de gran magnitud y capacidad que permita el recibimiento de la población que lo requiera. Tosagua es un cantón cuya población urbana es menor que la rural y, debido a estos números es usual que las personas tengan desconocimiento en áreas tecnológicas, siendo estas herramientas, las más útiles para optimizar el rendimiento productivo de la ciudad. De modo tal que el aprendizaje de tecnologías innovadoras podría aumentar las posibilidades de un fortalecimiento económico local, implementándose además, otras áreas que refuercen las actividades productivas del cantón.