Casa Bolívar – Hotel Museo, es un inmueble patrimonial construido a finales del Siglo VIII en la cuidad Loja. La casona colonial desde su concepción fue utilizada como vivienda unifamiliar. Sin embargo, en el año 2018, surge la necesidad de hacer productivo el sitio y con el dialogo común entre los promotores del proyecto y nuestro estudio de arquitectura en recuperar lo local, lo cotidiano, las técnicas y experticias evidenciadas en el sistema constructivo y por supuesto lo inmaterial inmerso en la propia arquitectura, se genera la oportunidad de repensar el sentido del lugar en el contexto urbano actual y la reconversión del programa que albergaba originalmente para convertirse en un Hotel Museo. El desafío planteado consistió en conservar la atmósfera que caracterizó esta arquitectura por más de 200 años, dándole una visión contemporánea con criterios de restauración e intervención. Casa Bolívar, tiene un sistema constructivo mixto resuelto en tapial, adobe, bahareque, madera y teja artesanal, el uso del portal interior y la predominancia de lleno sobre vacío son las características que le dan la formalidad a la Casa y cuya relación formal-material representa en sí misma la arquitectura tradicional de la ciudad. Las intervenciones arquitectónicas respetaron los ejes constructivos preexistentes. Se consideraron criterios como la liberación, consolidación, reestructuración y reintegración de partes, diferenciando elementos estructurales nuevos de los originales. Para ello, las crujías y su patio, se transforman en el eje principal de la propuesta conservando su estructura y adaptándola a nuevas funciones para el uso de un Hotel Museo con todos los servicios necesarios. Mostrar el material en su estado original fue un determinante de diseño, se personalizan y restauran los espacios manteniendo características comunes. Se restaura minuciosamente el papel tapiz, la pintura mural y tabular. Se intervienen los revoques, vigas, pilares y entablados de madera. Se incorpora la cubierta metálica que cubre el patio central que se sostiene en 4 columnas metálicas dispuestas en los extremos y con el uso de perfiles IPN se logra generar un contraste visual como resultado de un proceso de reinterpretación y abstracción de los abocinados de las puertas y ventanas del inmueble, se recupera el pozo de agua del patio con una visión actual y finalmente se utiliza una paleta de colores preexistentes como complemento del diseño. La arquitectura de Casa Bolívar se encuentra inmersa en una dinámica global, por descubrir, de reflexión, invita a entablar un diálogo de dar y recibir, de sensaciones y sentidos encaminados hacia un futuro con sentido de pertenencia e identidad. Es así como los trabajos ejecutados conservan la presencia de la pátina y el paso del tiempo que son aún testigos de la historia.