El Edifício Bandeira, próximo a la estación Vila Madalena, está insertado de forma delicada en la ciudad, con el diseño de dos volúmenes articulados entre sí y con jardines abiertos que amplían el paseo público. Su forma responde al deseo de garantizar las mejores vistas para las salas y los dormitorios de los departamentos, espacios protegidos por un balcón corrido que se extiende hacia las áreas de estar. El balcón, espacio de transición entre los ambientes y el exterior, protege el departamento del sol excesivo, de la lluvia y amplía los espacios internos. Las unidades cuentan con espacios generosos y grandes ventanales y puertas francesas, con gran flexibilidad interna. El sistema constructivo se basa en el hormigón visto, que dota al edificio de una sencilles sin excesos. El edificio es elocuente en sus cualidades más esenciales, espacios amplios, luminosos, ventilados, y de gran flexibilidad. Esta idea también se incorpora en los accesos de los departamentos, con ventanas que permiten la ventilación y la entrada de luz natural desde la salida de los ascensores. Las áreas comunes valoran el paisajismo, con diversidad vegetal y densidad arbórea. la piscina se expande hacia un espejo de agua y cruza el edificio suspendido, creando áreas con sol y sombra en el agua, como un estanque encondido. Los espacios exteriores cuentan con juegos especialmente diseñados para este proyecto. El Edificio Bandeira incorpora en su diseño todos los preceptos de sostenibilidad deseables para un proyecto de esta envergadura, como un sistema de calentamiento solar de agua, retención y reutilización de agua de lluvia, densidad vegetal en el paisajismo y la mejora de la iluminación y ventilación natural en las zonas comunes y privadas.