El proyecto de rehabilitación busca la integración del edificio al contexto, sin que la intervención llegue a afectar la memoria histórica. Para el desarrollo de la propuesta se establecieron tres tipos de estrategias: en primer lugar, las funcionales que permitieron adaptar la estructura existente, generar nuevos ejes de circulación (horizontales y verticales), centralización de las instalaciones sanitarias, distribución de los espacios entorno a los patios internos y zonificación por niveles. En segundo lugar, como estrategias formales se eliminó los elementos añadidos, se preservó la cubierta tradicional de madera con recubrimiento de teja, la homogenización de la fachada y la construcción de áreas faltantes como la parte posterior y la cuarta planta del proyecto. Finalmente se implementaron estrategias de diseño constructivo como la sustitución de los elementos afectados por patologías, la creación de un sistema de recolección y aprovechamiento de aguas lluvias, y el cambio de las perfilerías por ventanas de alto rendimiento. Para la rehabilitación del edificio se plantea sistemas constructivos tradicionales mejorados considerando los resultados de las nuevas investigaciones. En base a estas estrategias y a la utilización de la carta bioclimática de Givoni se establecieron las estrategias pasivas que se adaptan de mejor forma a las condiciones climáticas. Considerando que la ciudad de Loja tiene dos estaciones claramente definidas a lo largo del año, como resultado del estudio se establecieron tres tipos de estrategias pasivas que son: el calentamiento pasivo, el enfriamiento pasivo y ganancia interna. Un ejemplo de esto es la aplicación del calentamiento pasivo para lo cual se utilizaron los patios como puntos de captación de los rayos solares y su incidencia sobre los muros portantes de tapial como elemento del almacenamiento del calor, se acristalaron los pasillos que los rodean para conservar el calor, se ha utilizado la masa térmica del tapial para almacenarlo y finalmente ser distribuido en los espacios. Para determinar los nuevos usos que se sugieren al proyecto, se realizó un análisis de sitio basado en la metodología de la Dra. Laura Gallardo y encuestas aplicadas a los usuarios. Resultado de esto se zonificó el edificio por niveles estableciendo en la planta baja la zona comercial para que tenga una mejor relación con los transeúntes; en la primera y segunda planta alta se dispone el uso de oficinas; y en el cuarto nivel se plantea un área social. En el caso de la estructura de la ampliación del proyecto se utilizó en los muros perimetrales tapiales reforzados con varillas de acero.