La vivienda como elemento densificador y conector del Centro Histórico de Cuenca
Premio de participación: Premio Medalla de Oro Trabajo de Fin de Carrera
Categoría de participación: Arquitectónico
País de representación: Ecuador
Autores:
Arq. Nicole Michelle Tapia Ochoa
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Arq. Camila Mercedes López López
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Arq. Juan Francisco Cazorla Arteaga
Memoria
El presente proyecto plantea la intervención de dos predios vacantes con gran potencial
urbano, ubicados entre las terrazas del Centro Histórico de Cuenca y El Ejido, en el barrio
de Todos Santos, considerado una zona hiperservida que refleja un escenario ideal para densificar la ciudad con equipamientos y servicios a menos de 500 metros de distancia.
Es así que, se plantea un proyecto de vivienda colectiva que permita densificar la ciudad,
rescatando la habitabilidad en el sector a más de vincular usos mixtos capaces de
evolucionar con el tiempo, respondiendo a las nuevas necesidades de la vida
contemporánea en los centros históricos. El proyecto permite la conexión entre las
plataformas de la ciudad mediante un corredor urbano que rompe el borde natural de El
Barranco.
El programa arquitectónico del proyecto integra espacios comerciales, comunales, recreacionales y de habitat, en base a tres escalas de relación: la primera, relación edificio-ciudad, colocando el programa público como: plazas, patios y zonas de descanso en la planta baja permitiendo la conexión del proyecto con el entorno, la segunda, relación
edificio-vivienda donde se integra la condición pública con la privada, distribuyendo
comercios y servicios alrededor de las plazas en planta baja, de manera que, aporte a la
interacción entre transeúntes y residentes.
Finalmente, la tercera escala es la relacionada
al programa privado, colocando los bloques de vivienda sobre las zonas públicas,
generando espacios de servicio y descanso intermedios para incentivar a la relación
vecinal.
La propuesta arquitectónica al estar desarrollada en altura, nos permite incrementar el índice de densidad poblacional de 105 hab/Ha a 120 hab/Ha, lo que es óptimo para el barrio, ya que permitirá potenciar el uso de los espacios públicos propuestos, contrarrestando el índice de disminución de la población del 12 % registrado en el último censo.
Se combinó materiales comúnmente utilizados en la zona con nuevos, de forma que se
realce el pasado a través de la “alusión y el contraste” enfatizando la necesidad de que el
nuevo desarrollo exprese la identidad de la época, manteniendo una armonía con lo antiguo y comprendiendo la adaptación al cambio de los espacios.
Repensando la implantación de las tradicionales casonas se propone la distribución del proyecto en torno a plazas y patios urbanos, lo que incrementa la percepción del verde urbano en el centro histórico de un 8% a un 12% obteniendo un valor de 12m2/hab. óptimo
para el desarrollo de la vida.