Mar Mediterraneo 34
Premio de participación: Premio Panamericano
Categoría de participación: Intervención en Arquitectura Patrimonial o de Interés Patrimonial
País de representación: México
Autores:
Arq. Inca Hernández
|
%tratamiento% %autor%
Memoria
La Ciudad de México es un escenario histórico con una enorme riqueza cultural y arquitectónica cobijada en sus barrios mágicos. Uno de ellos es el pueblo antiguo de Tacuba, establecido en el borde del centro histórico de la ciudad a principios del siglo XX, y que fue absorbida por el desordenado crecimiento urbano.
Este fenómeno expansivo y migratorio se hizo notorio en los barrios alrededor del centro de la ciudad, presentando diferentes
transformaciones urbanas y sociales que dejaron vestigios de lo que estuvo habitado en diferentes épocas. Uno de estos testigos es la casona que alberga a “Mar Mediterráneo 34”; que consiste en una estructura que data de 1910 con un estilo ecléctico francés, y que tiene un valor histórico otorgado por el INBA y el INAH.
A partir de una investigación y estrategias participativas de los habitantes y vecinos, se transformó esta casa en una propuesta de vivienda colectiva multifuncional, involucrando a su comunidad. Incluso durante los tiempos difíciles de la pandemia, se lograron integrar espacios adaptados a las nuevas funciones de aislamiento generando espacios en silencio e introspección para la reflexión personal.
Los clientes e inversores entendieron el proceso de reciclaje y aprovechamiento cada espacio habitable, creyeron desde un principio en ese pasado y en cómo traerlo volver al presente De esta forma, el proyecto se convierte en un ejemplo de transformación. para el barrio y punto de partida de la acupuntura urbana.
Mar Mediterráneo 34 surge para dar una nueva vida a una vivienda existente de tres plantas, cuya estructura original estaba formada por dos volúmenes. La primer crujía alberga la fachada principal que se encontraba deteriorada,
mientras que el segundo (en varios estados de ruina) comunicaba con el patio principal. Teniendo en cuenta lo anterior, el proceso de diseño e intervención contempló la restauración de los elementos arquitectónicos y elementos artísticos de la fachada, entre ellos: detalles de cantera, dinteles, herrajes y losetas de vidrio.
En el interior, el segundo corredor fue reconstruido reinterpretando el pasado a través de una perspectiva contemporánea,
levantando un volumen que enmarca el cielo en el patio principal existente y retrata la disposición de los antiguos
portales, a través de vanos de doble altura con disposición intermitente. La estructura rehabilitada se desarrolla en tres niveles contemplando 7 unidades habitacionales en total, las cuales fueron diseñadas como diferentes viviendas flexibles espacios: loft, estudio, piso unifamiliar y ático; y que interactúan entre sí a través del patio principal y dos patios
complementarios.
Estos nuevos espacios se adaptan a las nuevas formas de habitar, creando un hogar multidisciplinar, globalizado e
interconectado que al mismo tiempo se distingue por la calidez del silencio y la introspección. Nuestro objetivo para esta
intervención es recuperar la imagen urbana para generar un legado que impulsa la transformación de Tacuba, para potenciar y rescatar su valor histórico y patrimonial, aprovechando la espacios de forma sostenible para satisfacer las nuevas necesidades y demandas de habitabilidad de las generaciones actuales.