ARQ es una revista cuatrimestral bilingüe publicada por Ediciones ARQ de la Pontificia Universidad de Chile. Fundada en 1980, su calidad se basa en un fuerte énfasis en la reflexión, investigación, y difusión crítica de la producción arquitectónica contemporánea. Ante un panorama marcado por importantes cambios en las formas de producción y diseminación de arquitectura, en los últimos años ARQ atenuó su rol en la difusión de arquitectura para relevar la producción de conocimiento desde –y alrededor– de la arquitectura. Entendiendo como una ventaja la situación desde donde se edita (Chile está en el margen de un continente que, a su vez, está en el margen del mundo occidental), sus números abarcan temas centrales desde una posición lateral, planteando una reflexión crítica sobre los nuevos fenómenos y condiciones a los que se enfrenta la arquitectura y la ciudad. Con la arquitectura como centro, los tres números de ARQ que aquí se presentan –“108: Vegetación”, “109: Cuidado” y “110: Decolonizar”– extienden deliberadamente los debates hacia márgenes de fricción y diálogo con otras áreas de conocimiento. Estos números incluyen temáticas ambientales, modelos de desarrollo, críticas a la vida cotidiana y nuevos futuros posibles. En conjunto, construyen una discusión informada desde y en torno a la arquitectura, el urbanismo, el paisaje, la filosofía, la ecología, la geografía, la sociología o el debate político. El número 108 reúne trabajos en torno al concepto de ‘vegetación’. Dado el contexto de crisis climática al que nos enfrentamos, el punto de partida de todo esfuerzo por preservar la vida en este planeta deberá considerar un diálogo constante con otros agentes no humanos, tales como la vegetación. Así, este número presenta distintas propuestas y discursos que, superando la visión antropocéntrica sobre lo vegetal, producen arquitecturas – escritas, pensadas, diseñadas o construidas – que ‘aprenden de’ y ‘piensan con’ las plantas. El número 109, a través de distintos artículos y proyectos, discute la condición compleja y polisémica del concepto de cuidado. Ello, en un mundo que ha asociado comúnmente el término a una dimensión doméstica, invisibilizándolo y separándolo del trabajo “formal” y de la esfera política pública. Hoy, ante la vulnerabilidad extendida en la que nos encontramos como planeta y que la pandemia hizo manifiesta, el número construye un espacio para discutir las lógicas del cuidado desde la arquitectura. Finalmente, el número 110 se sitúa en el cruce entre arquitectura y decolonialismo. Entendiendo las relaciones de poder heredadas y las nociones de superioridad entre diversas personas, razas y países, propone una discusión en torno a cómo el colonialismo ha influido en la construcción de la arquitectura como campo de conocimientos. Desde ese punto de partida, el número busca ejemplos que hayan abordado creativamente el debate decolonial, sugiriendo formas en que la arquitectura pueda tener una voz en este tema.