Creo que no hay sueño más grande que diseñar y construir la casa del ser que te trae al mundo y resulta que no hay mejor cliente. Diseñar una casa termina siendo ese puente entre imaginaciones, porque presenta lo más puro de la convivencia humana. En esta vivienda creo que hemos sabido escucharnos, yo a ella y ella a mí, con mis propias imaginaciones de lo que la casa debía ser. El encargo era sencillo, poder leer, poder tejer, tocar el piano (cuando finalmente lo lleve) en un espacio continuo, abierto al jardín; que a pesar de ser una casa pequeña se sienta amplia y que invite a la luz al espacio interior. La casa es hija de los conflictos bolivianos octubre y noviembre del 2019, y claro está, de la pandemia del Covid-19. Es resultado de una apertura en la dirección de la obra a dialogar con el albañil permitiendo que brote un cariño hacia sus espacios evidenciado en la manera casi artesanal y metódica con que muchos detalles se han resuelto. En abril del 2021 mi mamá, a raíz de la pandemia y sus efectos económicos, se traslada a Huajchilla. El proyecto debía hacer un uso inteligente de un estrecho y alargado lote, y respetar lo más que se pueda a toda la masa arbórea preexistente. La forma del lote entonces determina la manera de encarar el proyecto que es en esencia muy sencillo: se trata de una caja rectangular que presenta una incisión diagonal en la parte suroeste, cubierta por un plano rectangular desprendido del volumen principal y conectado a éste por una serie de muros rehundidos y planos de vidrio que le otorgan a la cubierta la sensación de flotar sobre la caja principal que compone a la vivienda. La cubierta presenta además una doble inclinación tanto en el sentido longitudinal como en el transversal que permite que luz desde el oeste ingrese a los ambientes principales en horas de la tarde. Dos adhesiones se suman a la casa, una batería de baños que funciona como volumen añadido y un plano de hormigón armado que se conecta diagonal a la vivienda que alberga la puerta de ingreso a la vivienda. El interior se divide desde el centro hacia los extremos de la vivienda, dejando a un gran espacio que componen la sala, el comedor y la cocina en el medio. La utilización de puertas ventana permite la ventilación cruzada, y abre este ambiente para generar un flujo continuo entre la terraza y patio exteriores que da al este y el jardín a través del cual se ingresa a la vivienda en el ala oeste. Hacia el norte se despliegan el dormitorio de visitas con un altillo en la parte superior y el dormitorio principal que se abre hacia el jardín mediante un amplio ventanal que conforma toda la fachada norte. Hacia el sur la vivienda despliega la lavandería, un depósito y el dormitorio en suite de la segunda habitante de la vivienda.